Testimonios en Colombia y Perú – Agosto 2016

Testimonio de sanidad de cáncer de tiroides – Popayán (Colombia):
En esta hermana de Popayán, Dios hizo un milagro, sanándola de cáncer de tiroides, los médicos determinaron operarla y el cirujano le dijo que ella podía perder su voz pero ella confió en el Señor, fueron 4 horas de cirugía, Dios se manifestó porque en la operación salió negativa para cáncer de tiroides, sin embargo ella perdió la voz y le dijeron que necesitaría de muchos días y muchas terapias para volver a recuperarla y fue cuando en esos días tuvo un sueño con nuestra Hermana María Luísa, en donde le indicaba que clase de terapias ella debía hacer, como las debía de hacer y con que frecuencia las debía de hacer y le hacía los ejercicios que ella debía de hacer para recuperar su voz y en 15 días esta hermana recuperó su voz al 100%. Lo testifica para la honra y gloria del Señor.
Sanidad de Síndrome de Down (Altamira, Bogotá, Colombia): Dios le decía a la hermana cuando estaba embarazada, que fuera fuerte, que le estaría dando una experiencia a la ciencia. Sucedió que su hija nació con síndrome de down, pero su hija al mes de nacida fue sana y los médicos se sorprendieron. También le dijo que le estaría sirviendo en la Iglesia y esto se ha cumplido, ya le sirve con imposición de manos y profecía.
Testimonios de reencuentro de dos hermanos luego de 26 años (Chimbote, Perú): El testimonio cuenta como desde la niñez dos hermanos en la sangre habían sido separados, los dos son colombianos y ambos en países diferentes conocieron los caminos de Dios al mismo tiempo y paralelamente Dios les prometía a cada uno por separado que se encontrarían un día en sus caminos; se habían buscado humanamente antes de llegar a la iglesia pero nunca dieron con sus paraderos, al cabo de los años estando en la iglesia cumplió el Señor su promesa pues se encontraron en el año 2010 a través del Internet por obra de Dios, pero aun se podían ver cara a cara y el 17 de Julio del 2016 se pudieron ver después de 26 años, Gracias a la promesa de Dios y se reencontraron como Dios lo dijo en “sus caminos”; para la honra y gloria de Dios.